Un homenaje a la gallega. Así con grelos y queso de la tierra, el San Simón da Costa, que es un queso con un toque ahumado que se produce en la provincia de Lugo. Un homenaje, además, muy merecido y muy prometido.
Hace ya un tiempo probé esta receta de mi Rosilet, una tarta de queso y espinacas a la crema que es, como todo lo que cocina Rosilet, absolutamente deliciosa y maravillosa. Así se lo dije a ella, pero también le prometí que le haría una versión gallega... Pasó el tiempo, yo me vi arrastrada por la cocina marroquí, por los postres elaborados, por la desidia del verano. Y ayer lo recordé. ¡¡Manos a la obra!!
Aquí la tenéis. Grelos (ya cocidos, yo los utilicé envasados) en vez de espinacas. Queso gallego en vez de Queso Mahón. ¡¡Tachán!! Una delicia. Ideal para el taper, o para dejar preparada con antelación cuando tenemos invitados. Y, desde luego, ideal para sorprender.
Y aquí tienes, para ti, Rosilet, la tartita que te prometí. Gracias por poner música en mi corazón. Gracias por estar ahí, #ailoviu.
Tarta de San Simón y grelos
Ingredientes:- 1 lámina de masa quebrada (o masa de hojaldre, al gusto).
- 2 cucharadas de salsa de tomate (la mía, aquí).
- 100-150 g de queso San Simón da Costa, rallado grueso (u otro queso de vuestro agrado)
- 1/2 cebolla.
- un puñado de piñones.
- un envase de 1/2 kg de grelos, bien bien escurridos.
- 200 ml de nata para cocinar.
- 1 huevo.
- nuez moscada molida.
- pimienta negra molida.
- sal.
- aceite de oliva.
Preparación:
1. Precalentamos el horno a 200ºC.
2. Preparamos el relleno. Para esto, calentamos el aceite en una sartén y en él sofreímos la cebolla picadita. Salpimentamos. Cuando la cebolla esté hechita le añadimos los piñones, le damos un par de vueltas, y enseguida agregamos los grelos, muy escurridos y un poco picados.
3. Le damos un par de vueltas más, y añadimos la nata y la nuez moscada. Dejamos reducir un momento, para que el relleno no quede demasiado líquido.
4. Colocamos nuestra lámina de masa (quebrada en mi caso) en el molde y le untamos la salsa de tomate por el fondo. Encima, distribuimos el queso rallado.
5. Batimos un huevo y lo mezclamos con los grelos. Distribuimos esta mezcla por encima del queso. Podemos ponerle otros poquitos piñones por encima, como para decorar.
5. Llevamos al horno durante unos 25-30 minutos, hasta que veamos la tarta dorada en la superficie y la base de masa esté hecha. Servimos templada o fría (que es como más me gusta a mí, de un día para otro).