La coliflor no me gusta, ni mucho ni poco, lo reconozco. A mis hijos tampoco, y cierto es que nunca he hecho grandes esfuerzos por introducirla en nuestra dieta, por la simple razón de que a mí no me gusta... Cierto es que, a veces, las mamis nos empeñamos en que coman espárragos, espinacas, bacalao, conejo... De todo, porque la dieta ha de ser sana y variada. Pero ¡ay si algo no nos gusta a nosotras! Se ve que la cocinera manda, y ese alimento no entra en casa...
Yo le tengo mucha manía a la coliflor desde pequeña. Mis padres, que tienen huerta en el pueblo, solían plantar millones de trillones de repollos y coliflores, en aquellos tiempos en los que tirar era vicio, así que comíamos repollos y coliflores hasta que se nos quedaba cara de los susodichos vegetales. Esto sucedía a lo largo de las estaciones con otro tipo de productos, judías verdes, tomates, lechugas, zanahorias, remolachas, o lo que hubiera o hubiese.
Mi madre odia las cremas de verduras. Así que, ¿imaginaos qué no comía yo jamás de los jamases? Hasta que me vine a vivir con mi pareja, creo que no había probado una crema de ningún tipo de verduras... Sin embargo, desde entonces me he hecho muy fan de ellas, son reconfortantes en el invierno, una manera sencilla y económica de llenar el buche y de que los peques coman verduras.
La que suscribe estas palabras os escribe en el medio de la primera ciclogénesis explosiva de la temporada en Galicia. Mucha lluvia, mucho viento, frío... ¡¡y ni siquiera ha llegado el otoño!! Así que hoy os traigo una cremita que, a pesar de todo el rollo que me he echado con la coliflor... ¡¡está riquísima!! Me sorprendió mucho su sabor tan delicado, no el típico de la coliflor tan fuerte y su textura suave... Es más que probable que la señora coliflor empiece a entrar más a menudo en la casa de esta servidora, no tenemos que anclarnos en las cosas que nos gustan y preparadas como siempre. A veces, un cambio en la preparación nos puede sorprender muy gratamente...
Con esta receta, queda pues inaugurada la temporada otoño invierno, las sopas y las cremitas, los guisos y los potajes y, como decimos por mi tierra... Se chove, que chova...
Crema de coliflor
Ingredientes (para 4 personas)
- 75 g de puerro.
- 50 g de cebolla.
- 1/2 kg de coliflor (media coliflor pequeña).
- 150 g de patata (una patata mediana).
- 25 g de almendras.
- 1 litro de caldo vegetal.
- una pizca de canela molida, comino molido y pimienta negra.
- aceite de oliva.
- sal.
Preparación:
1. Rehogar con un chorrito de aceite de oliva en nuestra cazuela el puerro y la cebolla picados.
Si lo hacemos en nuestra thermomix, ponemos el aceite el puerro y la cebolla, picamos 4 segundos en velocidad 4 y después programamos 5 minutos, temperatura Varoma, velocidad 1. Sin cubilete, para que evapore mejor.
2. Una vez que el puerro y la cebolla están pochados, añadimos la patata y la coliflor troceados, las almendras, las especias y cubrimos con el caldo vegetal. Ponemos al fuego hasta que hierva suave, y después dejamos a fuego lento una media hora, hasta que la coliflor esté blandita.
En la thermomix añadimos los ingredientes mencionados y cubrimos con caldo y programamos 35 minutos, velocidad 1, 100º.
3. Trituramos con nuestra batidora de mano o robot de cocina. Para la thermomix, trituraremos 1 minuto en velocidad máxima.
4. Probar y rectificar la sazón con sal y pimienta si fuese necesario.