Bienvenidos al Desafío en la Cocina {especial fin de curso}, porque sí, el desafío también se toma un descansito en julio y agosto, así que este mes es algo especial.

Las desafiadoras de este mes han cambiado y son las cinco compañeras más veteranas, que tienen el honor de ser las "invitadas especiales". Fueron ellas Toñi, Lola, Patricia, Chus y Carmela las que maquinaron este reto. ¿La idea? Un ingrediente común {la carne picada} y cinco recetas diferentes, cada una de un continente.

Esta bloguera, en el equipo de Chus, tuvo que viajar a África, más concretamente a Sudáfrica, de donde Chus nos propuso este pastel de carne que es, ni más ni menos, que el plato nacional de este país. 

Se trata de una mezcla compleja de sabores, pero que resultan al final estar completamente compensados, de modo que la carne, las frutas, las almendras y las especias parecen bailar en nuestros paladares... Definitivamente a mí el bobotie me ha conquistado...

Este plato nace de la influencia de los primeros holandeses y malayos que se establecieron en Sudáfrica, al olor de los diamantes. En la receta original se utilizaba cordero picado, pero hoy en día, se pueden encontrar boboties de las más diversas carnes, ¡incluso de cebra o avestruz!

Que no os asuste la cantidad de especias, no resulta exagerada al final, pero modificadla a vuestro gusto... De hecho, la receta original lleva además curry en polvo, que yo no puse porque a mi marido le sienta fatal... 

Os dejo además el enlace para que preparéis el chutney de mango (sí, estos eran los planes malignos y secretísimos que tenía yo para mi chutney). Es facilísimo y se prepara enseguida y, de verdad, merece la pena. Desde que lo he preparado se lo he añadido a varios platos, incluso simplemente como acompañamiento para una carne o unas verduras hervidas es delicioso (lekka chow, como dirían los sudafricanos). Si no os apetece prepararlo, podéis bien comprarlo envasado o sustituirlo por mermelada de albaricoque, como he visto en algunas recetas, pero sinceramente, creo que el toque agridulce-picante del chutney es un puntazo.

Bueno, me dejo de tanto rollo, y os dejo disfrutar de este delicioso pastel de carne traído de tierras lejanas.

Bobotie

1. Pelar y picar menudo la cebolla y los dientes de ajo. En una sartén caliente con aceite, empezar a sofreírlos. Mientras, poner todas las especias juntas en un bol pequeño, para que nos sea más fácil agregarlas. 

2. Cuando la cebolla esté suave y transparente, añadimos las especias y las sofreímos un minuto. Entonces agregamos la carne picada, que tenemos que sofreír brevemente, hasta que pierda el color rosadito. Salpimentar.

3. Añadimos los albaricoques en trozos no muy grandes, la manzana pelada y cortada en daditos y las pasas, y dejamos unos minutos, para que vayan soltando todos los aromas. Ponemos también las 3 cucharadas de chutney de mango en la sartén y removemos. Apartamos del fuego.

4. Añadimos las dos rebanadas de pan de molde sin corteza que habremos  remojado en un poquito de leche, y el huevo batido, removemos todo bien, para que esté bien mezclado. Colocamos en una fuente que pueda ir al horno.

5. Preparamos la cobertura mezclando los huevos batidos, la leche, la sal y media cucharadita de cúrcuma molida. Justo antes de meter en el horno, vertemos cuidadosamente esta cobertura sobre la carne.

6. Espolvoreamos por encima las almendras troceadas, y le colocamos 2 ó 3 hojitas de laurel.

7. Horneamos a 180ºC, durante aproximadamente 45 minutos, o hasta que la cobertura se haya cuajado y esté doradita.

8. El acompañamiento típico es un arroz amarillo, que yo he preparado utilizando arroz basmati, del modo habitual en el que preparo arroz blanco, pero añadiendo media cucharadita de cúrcuma al agua de cocer el arroz.

Fuente de la receta: Daring Gourmet

No olvidéis visitar toda la variedad de recetas que nos han traído este mes los participantes de Desafío en la Cocina. ¡¡Os van a encantar!!